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Entrevista con Aaron Greenspan, graduado de Harvard, creador original de “El Facebook”, innovador del sistema de pagos electrónicos y no-abogado autodidacta. (SEGUNDA PARTE)
Aaron fue generoso con su tiempo y con la profusión de cada respuesta, por que lo que debí segmentar la entrevista en tres partes. En la PRIMERA PARTE: INNOVACIÓN, REGULACIÓN Y EL FUTURO DE LOS PAGOS, Aaron habla de las leyes de transmisión de dinero de los Estados Unidos e identifica, con inusitada claridad y profundidad, los problemas que en su opinión, los problemas que ellas trae aparejados.
A continuación, Aaron ofrece su polémico punto de vista sobre Bitcoin, pero antes, repito la introducción al primer post, para beneficio de aquellos que aún no lo hayan leído.
Tras haber sido emprendedor de tecnología cuando adolescente, cuando cursaba estudios en Harvard, Aaron creó en 2003 el antecesor de lo que hoy conocemos como Facebook, Inc., que curiosamente se llamaba “El Facebook”. En 2009, llegó a un acuerdo con Facebook, Inc. y su compañero de clase Mark Zuckerberg, lo que le permitió tomarse un tiempo para pensar en su próximo proyecto y, finalmente, decidirse por enfocarse en el sistema de pagos, particularmente en los pagos móviles, área que le interesaba desde hacía mucho tiempo. Entre 2008 y 2011, invirtió prácticamente cada minuto de su vida, gramo de energía y capital a su disposición en un emprendimiento al que llamó FaceCash, que tuvo mucho éxito…hasta que un burócrata de un estado le dijo que lo iba a mandar a la cárcel federal.
Como pronto podrán ver, decir que Aaron no tiene pelos en la lengua es el eufemismo del siglo, así que soy consciente de los riesgos a los que me expongo al presentar sus fuertes opiniones aquí. No obstante, aunque tal vez no comulgue con su punto de vista y enfoque, decidí tirarme a la piscina y honrar el espíritu de este blog. Creo que el debate actual sobre la propuesta de BitLicencia y la naciente industria de las cripto-monedas se enriquecerán mucho con su experiencia de vida y su riguroso –y también cruel– análisis del panorama regulatorio de los Estados Unidos.
SEGUNDA PARTE: BITCOIN, EL COMUNISMO Y EL ESTADO DE VIGILANCIA
“Bitcoin comparte su aura egalitaria con el comunismo y, como él, podría fallar de manera colosal por razones que al principio no eran evidentes”.
Juan: Te has auto-declarado como escéptico en lo que respecta a Bitcoin. ¿Por qué? ¿Ha cambiado tu opinión acerca de él?
Aaron: Mi opinión no ha cambiado desde que escribí sobre él en diciembre de 2013. En ese momento lo llamé «El oro de los tontos». Hasta el momento, no se me ha demostrado estar equivocado, aunque admito que la valuación se ha mantenido relativamente alta. Sin embargo, no está prendiendo con el público en general y la atención de los medios ha venido de establecimientos que tienen vínculos con los inversionistas que más han invertido en nuevos empresas de Bitcoin, lo cual me hace dudar de su objetividad. Por ejemplo, Businessweek es propiedad de Bloomberg LP, que es inversionista en Andreessen Horowitz, que a su vez financia a Coinbase, Ripple y Dwolla (esta última se ha alejado de la esfera de Bitcoin debido al escrutinio regulatorio), entre otros. Parte de la cobertura ha sido buena, pero sería exagerado llamarla objetiva. Además, Bitcoin es un impresionante consumidor de electricidad. Supongo que dependerá de su éxito que esto sea considerado o no un «desperdicio». Personalmente, pondría el excesivo uso de electricidad en la categoría de desperdicio masivo.
“Bitcoin está sobre valorado y es fundamentalmente complejo y difícil de utilizar”.
Juan: ¿Y qué piensas acerca de Bitcoin con mayúsculas, es decir, la tecnología, el protocolo de software subyacente?
Aaron: Pienso que está sobre valorado y que es fundamentalmente complejo y difícil de utilizar. Todos ignoran el problema del 51%, el cual es un gran problema. Te garantizo que los gobiernos de China y/o Rusia no ignoran ese problema. Me parece que lo encuentran bastante interesante. Además, pienso que una vez superada la parte conceptual de Bitcoin, el protocolo deja de lograr sus objectivos en sentido práctico.
A principios del siglo XX, el comunismo tenía un atractivo similar: era nuevo, no había sido probado y era una manera relativamente innovadora de organizar la sociedad. Prometía igualdad y progreso y liberación del yugo del capitalismo. Y terminó fracasando de manera colosal por razones que al principio no eran evidentes. Bitcoin comparte ese atractivo igualitario con el comunismo y sus defensores también a menudo son escépticos del capitalismo tradicional. Cabe señalar que yo también estoy desilusionado con el capitalismo de varias maneras, aún como Gerente General de una sociedad anónima, así que podría pensarse que podría estar a favor de Bitcoin. Sin embargo, veo en Bitcoin desventajas similares a las que muchos estadounidenses comenzaron a notar al principio del comunismo de estilo soviético.
Por ejemplo, todos en la Rusia soviética eran «camaradas», de la misma manera que se puede identificar a quienes usan Bitcoin meramente con una dirección cifrada. Se suponía que todos en la Rusia soviética podían actuar libremente según sus necesidades y libres de la codicia de los opresores capitalistas, mientras que todos los usuarios de Bitcoin pueden enviar pagos o datos según sus necesidades, libres de la codicia de los opresores capitalistas (por ejemplo, los bancos que agregan sustanciales costos transaccionales). Se suponía que todos en le Rusia soviética se beneficiarían con la transparencia que viene naturalmente con la igualdad, mientras que todos los usuarios de Bitcoin pueden ver y analizar la cadena de bloques entera si así lo desean, a diferencia de los libros contables tradicionales.
“Te garantizo que los gobiernos de China y/o Rusia no ignoran el problema del 51% de Bitcoin. Creo que lo encuentran bastante interesante”.
Sin embargo, ¿qué sucedió en cada caso? Algunos camaradas se volvieron más importantes que otros. Algunos se volvieron enormemente más importantes, más ricos y más poderosos, los miembros del Politburo, por ejemplo. El aparato de gobierno anti-capitalista soviético comenzó a adoptar un papel más siniestro en la vida cotidiana que el de cualquier gobierno capitalista. La KGB transformó la «transparencia» en una gran organización de espionaje que, de una u otra forma, utilizó a la mayoría de los ciudadanos soviéticos en algún momento de su historia.
En el mundo de Bitcoin, ya estamos viendo cómo algunos participantes se están volviendo más importantes que otros. Aunque el objetivo nominal de la moneda es ‘desintermediar’ a las instituciones financieras, empresas como Coinbase y Circle ejercen sus cruciales naturalezas como ejes de comercio, lo que también se conoce como instituciones financieras. Cobran altos aranceles, como corresponde, lo cual sugiere que Bitcoin tal vez no sea capaz de funcionar tan puramente como sus defensores aseguran, al igual que sucedió con la Unión Soviética. El lado siniestro de Bitcoin salió a la luz el año pasado con los arrestos de Silk Road, para no mencionar el fracaso de Mt. Gox, la bancarrota fraudulenta de Coinlab (que ha sido prácticamente ignorada) y el escándalo de Charlie Shrem, que toca tangencialmente al mundo de las drogas. Es claro que ciertos programadores principales y/o de la primera hora poseen una enorme influencia persuasiva y financiera. Y es concebible que la cadena de bloques sea utilizada como herramienta de espionaje de las vidas financieras privadas de la gente, simplemente con un poco de trabajo detectivesco, como lo han demostrado varios artículos académicos, lo cual lo vuelve inútil para la mayoría de la gente.
La URSS tardó casi un siglo en fracasar. Dado que Bitcoin se mueve a una velocidad considerablemente más alta, estimo que podría venirse abajo y perecer de causas similares en menos de una década. Mientras tanto, a los entusiastas de Bitcoin les vendría bien leer «Rebelión en la Granja» de George Orwell.
Nuestro sistema de pagos está lejos de ser perfecto, razón por la cual estoy en esta industria. Sin embargo, Bitcoin no resuelve casi ninguno de sus problemas y, como dice el refrán, quienes olvidan el pasado, están condenados a repetirlo.
“Estimo que Bitcoin podría venirse abajo y perecer de causas similares a las que hicieron caer el comunismo en menos de una década”.
Juan: Si Bitcoin está destinado a fracasar, ¿cuál sería una mejor alternativa al sistema vigente hoy? ¿Qué problemas ves en el mundo de los pagos, el dinero y las finanzas que deban resolverse?
Aaron: Si te refieres a una mejor alternativa a Bitcoin, eso depende de cuál creas que es el objetivo de Bitcoin. Me parece que la mayoría de los usuarios de Bitcoin creen que su objetivo es evitar la supervisión gubernamental, sea por razones legítimas o no. En este sentido, no creo que exista una real necesidad de Bitcoin en los Estados Unidos, incluso si no eres fan de la Agencia Nacional de Inteligencia actual. Sin embargo, en países con gobiernos verdaderamente opresivos (Corea del Norte, Iran, ciertos países árabes, etc.), siempre habrá necesidad de sistemas económicos que no estén bajo control gubernamental. Por lo general, el trueque o el uso de algún tipo de boleta es suficiente. El trueque digital y anonimizado es francamente exagerado y sin sentido en un mundo en el que el dólar es moneda fuerte. Mi punto de vista personal, tal vez influido por mis creencias políticas, es que la meta de los críticos del gobierno no debería ser evitar la intervención de largo plazo en el sistema financiero por parte del gobierno, sino construir sistemas financieros y de gobierno que funcionen y respeten las libertades civiles. Una pequeña y cínica fracción de la sociedad siempre va a insistir en que es imposible crear esos sistemas, por definición o por otras razones. No estoy de acuerdo. Es perfectamente posible lograrlo con leyes y regulaciones apropiadas.
Si te refieres a una alternativa a las monedas y sistemas de pago que existen hoy, creo que se necesita una mejor infraestructura de pagos. En eso me encuentro trabajando hoy, así que espero que puedas ver la respuesta a esta parte de tu pregunta en mi trabajo. FaceCash es parte de eso. No obstante, si alguien quiere construir una moneda virtual superior solo por el placer de hacerlo, estaría a favor de una que trate el concepto de conservación de energía como un bien escaso. A mayor ahorro de energía, según lo indique tu boleta del servicio, deberías recibir una mayor cantidad de moneda.
«La meta de los críticos del gobierno no debería ser evitar la intervención de largo plazo en el sistema financiero por parte del gobierno, sino construir sistemas financieros y de gobierno que funcionen y respeten las libertades civiles».
Juan: Ahora que Bitcoin permite que las instrucciones de pago viajen independientemente de nuestra identidad, ¿de qué manera deberán evolucionar los sistemas de identidad para cumplir con las expectativas regulatorias, ya sea con fines de prevención de delitos financieros o de protección al consumidor?
Aaron: Creo que es poco apropiado hablar de «sistemas de identidad», como si fueran algo real. Nuestras identidades son en esencia retazos de información que por coincidencia se encuentran distribuidos a lo largo de cientos de bases de datos y formatos diferentes. Personalmente, me interesaría ver algo de estandarización, como mínimo, a nivel de la Oficina de Control Vehicular de los estados (Nota: en Estados Unidos, no existe un documento nacional de identidad y son los estados, a través de sus oficinas de control vehicular, lo que funcionalmente equivale a un documento de identidad: las licencias de conducir), para no mencionar las Secretarías de Estado, que administran los registros corporativos. Pero todo esto es independiente de Bitcoin y no estoy seguro de que llegaran a influirse mutuamente. Es más fácil motivar a la gente a usar un sistema de pagos ya establecido, ya que eso es lo que la gente valora y desea.
No se pierdan la TERCERA PARTE: EL MOMENTO DE LA VERDAD PARA UN JOVEN EMPRENDEDOR, tal vez la más polémica de todas, que publicaré la semana siguiente.
Pueden escribirle a Aaron a: aarong@thinkcomputer.com.
Por lo que veo, de esto se habló mucho hace años, cuando aun el bitcoin no lograba alcanzar su más alto potencial. ¿Tendrán que reconocer ahora los economistas que se equivocaron? ¿O será que el éxito que ha abarcado hasta a los brokers nuevos como iforex y cryptomt4 es algo ficticio para ellos? Por que si, el bitcoin ha sido todo un éxito y con ello las industrias, los brokers, y todos los que han apostado por la criptomoneda se han convertido en parte del auge del modelo económico del futuro.